Historia | Haras Vacación

Historia

En 1972, uno de sus propietarios, Raúl F. Lottero, impulsado por su pasión por los caballos, decide cambiar de rol en la actividad, mudando de propietario a criador, para lo cual se desprende de dos bienes muy preciados: su participación en la yegua “Vacación” y su barco “Boyero”, para encarar de lleno la crianza del sangre pura de carrera.

En 31 hectáreas ubicadas sobre la ruta 8, km 119 de la localidad de San Antonio de Areco, en la Provincia de Buenos Aires –una zona excepcional para la crianza del caballo– con 7 yeguas madres y la participación en el padrillo “Voodoo”, nace el haras que llevará el nombre de Haras Vacación, en reconocimiento a tantas alegrías brindadas por aquella yegua.

Con un empuje e intuición destacables, Raúl F. Lottero logra en poco tiempo un plantel de más de 80 yeguas madres de excelente origen genealógico, una de ellas, “Música”, le proporciona por medio de su hija “Manzanera”, el primer gran triunfo en una carrera selectiva : el Gran Premio Polla de Potrancas G1. Triunfos de esta jerarquía se convertirán con el tiempo en una costumbre para el haras.
Su política desde el inicio, fue la búsqueda de la perfección en la crianza de los caballos, brindándole a su clientela las mejores condiciones para la obtención de soñados triunfos. Nunca escatimó esfuerzos para lograrlo, ya sea perfeccionando el plantel de yeguas madres como incorporando los mejores padrillos del momento.

Uno de ellos, “Pepenador”, –Padrillo del año 1989– marcó un vuelco definitivo en la evolución del haras, produciendo campeones de la talla de “Cheyenne” (Campeón 3 años Macho), “Bobsy” (Campeón 2 años Macho), “Fiara” (Yegua del año y Mejor 3 años Hembra) y “Double Paid” (Caballo del Año). Favorecido por la inclusión de este fenomenal padrillo, sumado al efecto de la búsqueda constante del más alto nivel en la crianza, el Haras Vacación logra en 1989 su primera distinción como Criador del Año.

Todos estos esfuerzos en busca de los mejores resultados a nivel nacional se ven coronados cuando en 1988 de su cría surge una potranca llamada “Paseana”, que luego de obtener importantes triunfos en el país y en los Estados Unidos, alcanza una distinción que muy pocos ejemplares logran, como es el premio a la Mejor Yegua del Mundo, por dos años consecutivos (1992-1993). Este hecho significó el despegue hacia el exterior del Haras Vacación, adquiriendo a partir de ese momento el merecido reconocimiento del turf internacional.

La persistencia en una política de constante innovación, la incorporación de yeguas madres y padrillos, hace que llegue al haras en el año 1997 el padrillo “Roy” –ya habiendo obtenido nueve estadísticas consecutivas en Chile– que al igual que “Pepenador” en su momento, marca el inicio de otro período generoso en éxitos sobresalientes.

Este excepcional ejemplar logra el premio al Padrillo del Año en el 2001 y 2002 y finaliza ese mismo año al frente del ordenamiento de reproductores 2 años, ingresando en el año 2004 al selecto grupo de padrillos que han producido más de 100 ganadores clásicos, galardón alcanzado cuando “Candidato Roy” gana el South African Nursery, convirtiéndose además en el Campeón 2 Años de ese país sudafricano.

“Roy” ostenta la singular distinción de haber producido campeones en cuatro países y haber sido líder de estadística en tres de ellos.

“ROY” (1983-2004) GRACIAS. Nuestro homenaje a uno de los padrillos más generosos de la historia”, fueron las palabras de despedida publicadas en “Turf Diario”,que el Haras Vacación tributó a este notable ejemplar.

En el año 2000 entra por primera vez a la Argentina "SALT LAKE ", cuya primera y unica producción en el Haras Vacación consiguió: Ganador de la Estadística de Padrillos y Estadística Clasica de Padrillo de 2 años, y 5º en la Estadística General de Padrillos.

A partir del 2003 se dio un vuelco a la política de servicios acompañando las tendencias internacionales de incorporar servicios de diferentes padrillos de jerarquía mundial; tal el caso de “Vision & Verse”, “Shuttle Diplomacy”, “Hennesy”, “Thunder Guch”, “Honour & Glory” y del prestigioso Mutakddim entre otros.

La pasión y el espíritu innovador de Raúl F. Lottero han encontrado cauce en la dedicación de sus legados, quienes han profundizado aquel esfuerzo y continúan construyendo una historia plagada de logros, manteniendo el haras en un lugar de privilegio que prestigia al turf argentino en su conjunto.

Su plantel de más de 150 yeguas madres enriquecido permanentemente con nuevas incorporaciones, cuenta con más de 50 madres campeonas ó madres de campeones, habiendo producido a la fecha más de 65 ganadores de G1.

Sus recursos humanos guiados por un mismo ideal, su privilegiada ubicación geográfica en una de las mejores zonas para la crianza del sangre pura de carrera y su excelencia en la crianza, hacen que el Haras Vacación sea una de los establecimientos más prestigiosos y reconocidos del mundo en su género.